sábado , 6 septiembre 2025

Tribuna libre de Antonio de Miguel Antón, miembro de la asociación Democrática Ciudadana, ADC: ‘¿Y después del fuego, qué?’

Semanas después del fuego, en cuanto empiece a llover, surgirá una capa herbácea que permitirá germinar más vida; pero los bosques tardarán unas cuantas décadas en volver a aparecer. Afortunadamente muchas especies mediterráneas, como encinas, quejigos, coscojas, carrascas, alcornoques, robles, ciertas especies de pinos o matorrales como brezos y retamas, están adaptadas al fuego, y podrán rebrotar o regenerarse de forma natural y de una forma relativamente rápida.

Además del mundo vegetal hay otras víctimas y muchas otras cosas que recuperar cuando el fuego se ha extinguido. El fuego deja una transformación de biodiversidad, de suelo y de deterioro para todo el mundo rural de dimensiones incalculables. Los daños que producen estos incendios son descomunales: las casas, los accesos, las pistas forestales, los caminos, las carreteras, los cobertizos, las cuadras, la maquinaria, los paneles, las colmenas, los almacenes de resinas, el ganado, los  suministros y conducciones de agua, de luz, las captaciones de agua, las balsas o presas de abastecimiento y tantas otras infraestructuras que deben ser reparadas o sustituidas de forma inmediata para que las poblaciones puedan tener los servicios básicos.

Nuestro mundo rural nos proporciona y nos abastece de muchos recursos que a día de hoy no se ponen en valor y que deberíamos compensarles por proveernos al conjunto de los ciudadanos. Hablo de esos servicios  ecosistémicos que los montes nos dan, como las  materias primas renovables, la calidad del aire, la absorción del CO2, el freno a la desertificación, la creación y sujeción de suelos, la infiltración y el aprovisionamiento de agua, de albergue y de soporte de biodiversidad entre tantos otros.

Nuestro montes y nuestros bosques necesitan ser limpiados y desbrozados; es fundamental los trabajos de carácter preventivo a lo largo del año para la prevención y defensa ante estos atroces incendios forestales; y aunque si es cierto que esté permitido limpiarlo legalmente, es muy complejo hacerlo por los particulares que viven en sus pueblos; hay demasiada burocracia para cosas tan sencillas como podar o retirar un árbol caído, pues tienes que ir a la web del Ministerio de Transición Ecológica, solicitar el impreso, compulsarlo en la Diputación, pedir cita en el Ayuntamiento, hacer un curso de Ecorresiliencia Cinegética y descargar Javascript, entre otras cosas; fácil no es ¿verdad?

Antonio de Miguel Antón

Nací en un pueblo de la Sierra de la Demanda burgalesa rodeado de un pinar que forma parte del mayor pinar de Europa situado entre Soria y Burgos;  el 95% de mi pueblo es monte y de él hemos vivido durante siglos. Allí se mantiene una costumbre medieval denominada la Suerte de Pinos. Se sortea su aprovechamiento y los vecinos lo cuidamos porque aún forma parte de nuestra subsistencia y se mantiene vivo el vínculo entre el hombre y su tierra, y por consiguiente la protección de ésta frente a las inclemencias de la naturaleza, el abandono, y finalmente el fuego. Cada 1 de mayo se sortea entre los vecinos el aprovechamiento de los pinos secos y desarraigados, y cada 1 de octubre el de los pinos verdes. Y a quien le toque no sólo aprovecha el monte, sino que lo cuida también. Ya no produce tanto como hace siglos, cuando a lo mejor una familia vivía de los pinos. Tal vez esta medida y la cultura y educación del fuego que tenemos, ha hecho que llevemos sin ver un fuego potente por allí unas décadas… Y cuando este asoma, toda la comarca sale a su sofoco en un gesto de solidaridad tan grande que debería recibir un premio al respaldo y a la fraternidad entre pueblos vecinos.

Antonio de Miguel Antón, miembro de la asociación Democrática Ciudadana, ADC

NOTA DE LA REDACCIÓN: EL HERALDO DEL HENARES acepta el envío de cartas y artículos de opinión para ser publicados en el diario, sin que comparta necesariamente el contenido de las opiniones ajenas, que son responsabilidad única de su autor, por lo que las mismas no son corregidas ni apostilladas.

     EL HERALDO DEL HENARES se reserva la posibilidad de rechazar dichos textos cuando no cumplan unos requisitos mínimos de respeto a los demás lectores o contravengan las leyes vigentes.

Acerca de El Heraldo del Henares

Diario digital de Guadalajara y el Corredor del Henares fundado en 2009.

Ver también

Tribuna libre de la Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos de Castilla La Mancha: ‘Si se nos prohíbe faenar por riesgo de incendios, esos días no deberían cobrarnos la cuota de la Seguridad Social’

Unión de Castilla-La Mancha está indignada con que, a pesar de la prohibición de trabajar …

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.