La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado hoy en un comunicado «la agónica situación que padece la plantilla de Caobar«, empresa localizada en las localidades de Taracena y Poveda de la Sierra (Guadalajara) y que se encuentra en concurso de acreedores.
La empresa, tras los expedientes temporales de regulación de empleo llevados a cabo en diciembre de 2024 y el pasado mes de abril, ha vuelto a plantear un nuevo ERTE que afecta a 36 trabajadores, lo que supondría en la práctica la extinción de la empresa al ser imposible la producción de caolín y sílice, actividad en la que Caobar ha sido todo un referente con más de 60 años de experiencia.
De hecho, del total de la plantilla de Caobar, compuesta por 86 trabajadores, el nuevo ERTE, que se suma a los ya ejecutados, plantea mantener a solo 9 empleados, de los cuales sólo 2 son operarios.
La situación es tan crítica que se ha comunicado a los trabajadores la imposibilidad de hacer frente a las próximas nóminas de julio, agosto y septiembre, además de que no se ha abonado la paga extra correspondiente a julio.
Alberto Yago, delegado de CSIF en Caobar, ha señalado que “muchos compañeros, tras los ERTE llevados a cabo, están cobrando 600 o 700 euros y encima agotando las prestaciones del paro, es absolutamente terrible. Y encima ahora nos encontramos con que la empresa vuelve a plantear otro ERTE y nos dice que no hay dinero para pagarnos. Está siendo la ruina, hemos llevado a cabo una reunión e incluso la mayor parte de la plantilla está de acuerdo en que se lleve a cabo la liquidación de la empresa para poder buscarnos la vida, ya que así estamos completamente secuestrados”.
CSIF ha pedido comprensión a Caobar y que piense en una plantilla de trabajadores que está siendo la víctima involuntaria de una mala gestión.