Fuentes del Ayuntamiento de Guadalajara han informado en un comunicado que el pasado viernes 19 de enero, una mujer se personó en las dependencias de la Policía Local para manifestar que había sido agredida por su esposo.
Según estas fuentes, la mujer presentaba sangre en manos, cara, cuello y una mano hinchada.
La mujer explicó a los agentes que había dejado a su hijo menor en el interior del domicilio, por lo que fue acompañada por agentes de la Policía Local hasta su vivienda, en donde comprobaron que no se encontraba el marido.
Posteriormente, fue trasladada a un centro médico para ser asistida de sus heridas y más tarde acompañada hasta las dependencias de la Comisaría de Policía Nacional para presentar la oportuna denuncia.
Se trata de una mujer de 23 años de origen marroquí.