El molino de Alustante (Guadalajara), acaba de ser incluido en la Lista Roja que elabora la asociación Hispania Nostra en la que se recoge más de 1.300 edificios de especial interés o monumentos españoles que se encuentran sometidos a riesgo de desaparición, destrucción o alteración esencial de sus valores.
Según han informado fuentes de esta asociación en un comunicado, este molino de agua fue construido en 1907 y recibe en la actualidad el nombre de molino de ‘Los Tortillas’, apodo que tienen sus actuales propietarios.
Desde el punto de vista arquitectónico era una torre ciclópea, con casa vivienda familiar añadida y se encuentra situado en el camino de Alcoroches, con huerto, y a su espalda, con paridera y con tierras de labranza anexas, según han informado fuentes de esta asociación en un comunicado.
Cumplía una doble función. De un lado, la molienda de cereales, especialmente de trigo y centeno, para el abastecimiento de los lugareños; de otro, servía de vivienda del molinero y su familia.
El molino, construido en piedra, tomaba el agua almacenada en una pequeña presa, y desde allí, a través de un canal, descendía hasta la torre del mismo para bajar definitivamente al caz y mover las piedras de la molienda.
El molino, edificio singular del patrimonio civil y de propiedad privada, es una obra de cantería de planta rectangular que conserva en su parte superior la balsa que se utilizaba para la recogida de las aguas necesarias para mover el molino hidráulico.
A pesar de que esta construcción se encuentra incluida en el Inventario del Patrimonio Cultural de Castilla-La Mancha, su abandono es más que evidente, con un preocupante estado de conservación y riesgo de ruina, han finalizado estas fuentes.
Varios edificios históricos de Guadalajara en la Lista Roja
Son muchos los edificios históricos de la provincia de Guadalajara incluidos en la Lista Roja del Patrimonio de Hispani Nostra, que recoge más de 800 monumentos españoles que corren el riesgo de desaparecer si no se actúa de inmediato.
Entre ellos se encuentra en este estado la ermita de la Virgen de los Llanos, en Hontoba (Guadalajara), que ha sido incluida en la mencionada Lista Roja porque hace tiempo que la cubierta de la ermita se hundió, y toda ella presenta un alarmante estado de ruina general.

También la ermita de la Virgen de la Carrasca, que data del siglo XIII y se encuentra en el municipio guadalajareño de Rillo de Gallo.

Según Hispania Nostra, esta ermita está situada en un poblado actualmente abandonado, a 6 kilómetros al norte del casco urbano del pueblo de Rillo de Gallo (Guadalajara), sobre una pequeña colina a la que se llega por el camino de Pardos (Borbollón, Fuente del Cura, Vivero).
Actualmente, se encuentra en una situación de derrumbe total, por lo que dicha ermita acaba de ser incluida en la Lista Roja del Patrimonio que elabora esta asociación.
Otras de las denuncias públicas realizadas por esta asociación respecto de edificios en riesgo de derrumbe fue la relativa a la ermita de la Soledad de Campillo de Dueñas, un edificio del siglo XVI que se encuentra completamente abandonado.
O la relativa al castillo de Anguix, en Sayatón, una fortaleza del siglo XIV, situada sobre una peña en el embalse de Bolarque, en el río Tajo y que cuenta con la mayoría de las características propias de las construcciones militares de ese siglo.
Ni siquiera su catalogación como Bien de Interés Cultural, BIC, lo ha salvado del estado de ruina en el que se encuentra.
También la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Trijueque fue fundada por fray Miguel López de Serna, natural de Trijueque y obispo de Gran Canaria, que actualmente se encuentra en ruinas.
Antiguamente fue el palacio de los Mendoza, en el cual estuvo custodiada en 1470 Juana “La Beltraneja”, hija de Enrique IV de Castilla.
Otro edificio cuyo estado de ruina y abandono ha provocado su inclusión en esta Lista Roja es el convento de Jesús del Monte, ubicado en Loranca de Tajuña (Guadalajara).

Se trata de una casa de retiro de los jesuitas de Alcalá construida en el siglo XVI sobre un monasterio dominico y una anterior ermita dedicada a Santo Domingo. De grandes dimensiones, gozó de gran importancia en la comarca gracias a sus propiedades, bienes culturales, artísticos y su archivo-biblioteca. Ahora, se encuentra completamente derruido y abandonado.
En Molina de Aragón se encuentra el palacio de los Arias, que fue edificado en el siglo XVIII y amenaza con desplomarse por su pésimo estado de conservación. «Los propietarios del palacio de los Arias no se hacen responsables de su conservación y pronto se vendrá abajo», han señalado desde Hispania Nostra.
Por este motivo, esta asociación incluyó este inmueble en su Lista Roja el pasado 14 de marzo de 2021.
Otro elemento arquitectónico a punto de desaparecer es el puente colgado de Azuqueca de Henares (Guadalajara), construido por Valeriano Madrazo Escalera, V Marqués del Valle de la Colina en 1879 como medio de paso para los trabajadores de la finca para el cruce de río en las labores agrícolas y actividades cinegéticas como la caza o la pesca.
Actualmente el deterioro se ha acelerado a raíz de las inclemencias del tiempo de los últimos años y el completo abandono. Apenas quedan tablas de madera en buen estado, y el crecimiento descontrolado de un árbol cercano amenaza la estabilidad de los tensores sobre los que se sujeta la estructura.
No todo son malas noticias: el monasterio de Bonaval pudo salir de la Lista roja
Y dentro de todas estas malas noticias para el patrimonio histórico alcarreño, una buena nueva: tras unas primeras obras de adecuación y consolidación, el monasterio de Bonaval, en Retiendas (Guadalajara), abandonó la Lista Roja del Patrimonio que elabora Hispania Nostra y pasa a la Lista Verde.
El monasterio de Bonaval es un monumento capital en la historia de la arquitectura medieval de España. Es, además, uno de los cenobios medievales de la Orden del Císter más meridionales, de estilo románico muy evolucionado hacia formas góticas, todo dentro de las normas cistercienses. La iglesia debió iniciarse antes de bien entrado el siglo XIII. Más tarde, en el siglo XVII, sufrió severas reformas.
Otro monumento que ha escapado de la ruina es el el castillo de Villel de Mesa (Guadalajara), que ha sido consolidado con una inversión de medio millón de euros aportada por el ministerio de Hacienda.
Esta intervención ha ido acompañada de un seguimiento arqueológico que ha permitido mejorar la comprensión del edificio y ha aportado información sobre su historia.
Las obras fueron declaradas de emergencia, y se produjeron tras los desprendimientos de rocas del castillo que causaron daños en viviendas adyacentes de titularidad privada, según informaron en su día fuentes de la subdelegación del Gobierno de España en Guadalajara en un comunicado.
El Heraldo del Henares





